

Arbusto mediterráneo autóctono de extraordinaria rusticidad. No pierde sus hojas con el frío y florece en racimos de pequeñas flores blancas al final del invierno y principios de primavera. Se emplea como planta singular en jardines, puede adaptarse recipientes en nuestra terraza y también es apto para la confección de setos y pantallas vegetales. Altura aproximada 60/70 cm.